LIDERA UNA REUNIÓN EN EL VESTUARIO PARA CERRAR FILAS
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Sergio Ramos toma el mando del vestuario en Valdebebas
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Insistió a sus compañeros en la necesidad de aparcar polémicas
Sergio Ramos tomó el mando ayer en el vestuario de Valdebebas. Sin la presencia de Mourinho, el central ejerció de capitán para frenar la espiral de encontronazos entre los jugadores y el cuerpo técnico que está sacudiendo al equipo en los últimos días.
Ramos insistió a sus compañeros en la necesidad de una tregua para preparar lo mejor posible la final de la Copa del Rey y evitar guerras que impidan centrarse en el gran objetivo antes de echar el cierre a la campaña.
Las últimas polémicas están desviando la atención de una manera que Ramos y muchos de los futbolistas blancos consideran peligrosa a la hora de afrontar un compromiso tan importante. De ahí que el central haya querido atajar el problema a tiempo y tomar la iniciativa a la hora de pactar un compromiso por parte de toda la plantilla de no enturbiar más el ambiente de lo que ya está.
La rueda de prensa de Karanka posterior al partido contra el Málaga no hizo más que confirmar la tensión que hay entre el cuerpo técnico y varios jugadores blancos. Por ello, Ramos pidió a sus compañeros cerrar filas y evitar echar más leña al fuego hasta el 17 de mayo. A partir de ahí, será el momento de ajustar cuentas.
La fuerza de la unión
La reunión de Valdebebas explica el mensaje de unión que lanzó horas más tarde Sergio Ramos en La Sexta con motivo de su asistencia a la Caja Mágica para ver el partido de Nadal. "Quizá sea el momento de decir basta de polémicas, tanto del míster, de Iker, de Pepe... Ahora tenemos que buscar la unión del equipo y pensar en la final, que es lo importante. Es el momento de dejarnos de egos individuales y pensar en ganar la final. A partir de ahí, ya se verá", señaló el jugador.
Sobre su estado físico, dejó claro que jugará ante el Atlético: "Voy mejor, la idea es recuperarme para la final. Espero poder jugar".